ABEL LONGORIA RELATA SU VERDAD

El pasado lunes 12 en este espacio se publicó: “Mi compadre Barbosa ordenará liberen fincas embargadas…”


  20-12-2022 11:50  Gerardo Pérez García 






Cita que sirve para dar contexto a la narrativa del licenciado Abel Longoria Barra, durante la charla-entrevista-aclaración que tuvo con este tecleador, donde aclara puntualmente que “ni fue amigo, mucho menos compadre del extinto gobernador Miguel Barbosa Huerta”.
Expone que es “una infamia el que se diga que pidió a su clienta cuatro millones de pesos y una camioneta BMW para dárselos al mandatario para que ordenara la liberación de dos predios con embargo fiscal”.
Remata, conozco desde hace muchos años a la señora Amelia Elizabeth Tobón Sánchez, además de haber sido su abogado. Y, tanto la camioneta –BMW 2021- como el dinero que le ha cubierto, “son parte de los honorarios que la señora Tobón me pagado por el litigio de los predios”.
A continuación, la historia de Abel Longoria.
“A ver Gerardo, en primer lugar debo decir que soy un abogado con treinta y cuatro años de ser postulante, no inicie ayer, y que mi impronta forma de litigar es y siempre ha sido transparente con mis clientes, jamás les he ocultado nada, ni mentido; incluso soy de los que si se consigue el resultado convenido me pagas y si no, no me pagas nada, lo que en los últimos años me ha afectado en demasía porque los clientes ya viendo resuelto sus asuntos no me pagan, por lo que he tenido que acudir a los tribunales para hacer efectivo el pago de mis honorarios.
“Tal como es el presente caso, de ahí que ya he celebrado contratos de prestación de servicios, y te quiero decir que por mi despacho han pasado asuntos de personas que han tenido relaciones directas con gobernadores e incluso con Presidentes de la República; y que por difíciles que sean, jamás he pedido que esas relaciones influyan en el resultado de mis asuntos.
“Ahora bien, te quiero decir que al –extinto- gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta lo conocí aproximadamente en 1986, como postulante que era, al igual que yo, pero nunca fuimos amigos; nuestra relación era de índole profesional, debido a que el despacho al que yo pertenecía era antagónico, casi némesis del despacho de él.
“Jamás fue mi compadre, mucho menos como mi hermano, nada parecido, mucho menos que mi hijo es su ahijado. Si fuera cierto ese argumento, tú creerías que mi hijo tendría un trabajo de capturista, claro que no, estaría en un puesto importante; y yo estuviera formando parte de su gabinete.
“En segundo lugar quiero decirte que la señora Amelia Elizabeth Tobón Sánchez es una persona que conozco desde hace varios años atrás, a quien le he atendido algunos asuntos, y se por lo mismo que cambia continuamente de parecer.
“Ella se presenta en mi despacho en noviembre del 2019 con el objeto de contratar mis servicios profesionales por un daño patrimonial de una mala administración que tuvo consecuencias fiscales no generadas por ella, ya que compartía en sociedad un negocio que involucra también un bien raíz.
“Para ello, muestra -a este espacio- copias de un Acta Constitutiva y una escritura que así lo confirma. Situación y documentos que son accesibles para cualquier persona, ya que se encuentran inscritos en el Registro Público de la Propiedad y que son del dominio público.
“Lo que derivó en el embargo de sus propiedades, y después de revisar el asunto decidí tomarlo, procediendo a la firma de un Contrato de Prestación de Servicios, con el cual protegiera el cobro mis honorarios, dado los antecedentes de la señora Tobón; y por motivos de estrategia te muestro solo un fragmento” –el cual se tuvo a la vista-
Agrega Abel Longoria:
“Se presentan las acciones legales conducentes y como esos hechos involucran a la Secretaría de Planeación y Finanzas, se le hizo saber a dicha Secretaría, a finales del 2020, lo que estaba sucediendo… la cancelación ilegal de los embargos recaídos sobre los bienes de la señora Tobón.
“Y es la Secretaria de Finanzas –María Teresa Castro Corro- quien inicia una investigación, y ordena la reinscripción de esos embargos, mismos que subsisten hasta el día de hoy; es decir, ni fueron vendidos, mucho menos están libres del aseguramiento de la autoridad fiscalizadora, lo que demuestra que es una mentira la supuesta dádiva para cancelarlos. Verdad que se desprende del certificado que aquí te muestro –lo pone en la mesa para su lectura-
“Posteriormente y después de varias acciones que realicé, la señora Tobón retoma la posesión y administración del negocio, cuestión que no tenía desde 2008.
“Y después de una negociación complicada, logré una extraordinaria negociación para ella… por medio de la que ahora ella es dueña del cien por ciento del bien inmueble del que solo era propietaria del veinticinco por ciento. Y también dueña del cien por ciento de la negociación; certificado que te muestro –lo muestra al tecleador-
“Lo que derivó en un nuevo contrato que reducía mis honorarios al cincuenta por ciento de lo inicialmente pactado, que incluía una camioneta –BMW 2021-, la cual al día de hoy, aunque ya se terminó de pagar en julio de este año, no se me ha facturado, es decir, no ha ingresado a mi patrimonio, pues se sacó a crédito; además comenzó a realizar pagos parciales mensuales con motivo de mis honorarios, de los cuales tengo respaldo fiscal, contrato que ya no quiso firmar Amelia Elizabeth Tobón.
“Te muestro, por estrategia judicial, parte de ese nuevo contrato en donde consta lo convenido con ella, sin embargo, en octubre de este año se negó a continuar cumpliendo con los pagos, bajo el argumento que yo no cumplí con resolverle el problema fiscal.
“Incluso me llevó un abogado para informarme que dejaba de ser su asesor legal, por lo que al día de hoy me debe una gran suma de dinero de mis honorarios justamente ganados.
“Y la semana ante pasada me llamó un abogado de nombre Arturo “N” -conversación que tengo grabada- para decirme que la señora Tobón le dijo que me había dado un millón de pesos y la camioneta para el Ejecutivo, no cuatro millones como se señala.
“Por lo que me queda claro, que todo esto es con el objeto de manchar y dañar mi imagen y reputación, así como la memoria y nombre del extinto gobernador Miguel Barbosa Huerta, que incluso involucrara a su esposa.
“Es una bajeza que se basa en la calumnia para no pagar mis honorarios, que fueron ganados de manera limpia y transparente,
“También te enseño unos chats -vía WhatsApp- entre la señora Tobón y yo en donde puedes ver todo lo relativo a la dación en pago a mi favor de la camioneta, faltas de respeto, que está consciente que debe pagar el crédito fiscal y otras cuestiones.
“Ahora a la acción de cobro de honorarios, agregaré la de extorción y daño moral hecha en mi contra por dicha persona y por los que la asesoraron para tal propósito.
“Te lo digo Gerardo sin ambages y de manera enfática…
Jamás le pedí a Amelia Elizabeth Tobón Sánchez cantidad alguna para darla como dádiva a persona o funcionario alguno, y que todas las cantidades de dinero que me entregó, como gastos y honorarios, se encuentran respaldados legalmente, y no como infamantemente y con el propósito de no pagar mis honorarios se ha inventado que me dieron la camioneta –BMW 2021- y cuatro millones de pesos para que yo lo diera como dádiva para que se lograra resolver su asunto, por lo que procederé legalmente en contra de los que se han confabulado para dañar mi reputación y buen nombre.
“Agrego, que ante el foro que acuda o ante el personaje que lo haga para difamarme de igual manera acudiré para demostrar su mentira e infamia”.
Ahí está la verdad, su verdad, de Abel Longoria Barra.
¿Se iniciarán acciones legales por todo esto?
Al tiempo. 
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